miércoles, 26 de enero de 2011

¿Y mis manos?

Nuestro destino nos cansa,
Nuestras almas nos pesan,
Tus labios se muerden,
Mis manos descansan...

Nuestro destino se cansa,
Nuestras muecas se alejan,
Tus almohadas preguntan,
Mis camisas se planchan...

Nuestro destino se amansa,
Nuestro juego se empaña.
Tu anonimato sigue tuerto,
Y te recuerdo, mi ceguera.

Nuestro destino se ensancha,
Nuestras lluvias se secan,
Tus escaleras se alargan,
Mis paredes desempapelan...

Nuestro destino, nos cansa.
Nuestras diferencias se gruñen,
Tus dedos... sanan.
Mis manos? descansan...

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