Mis deseos siempre parecen desearte,
Hasta que orillo la punta de tus pies.
Pregunto como esta el clima por ahi,
Y me vuelvo un quinceañero bobo...
Oportunidades si bien no sobraron,
Debo admitir que tampoco faltaron,
La almohada me comento de la casualidad,
A lo que yo refute argumentando "causalidad".
Si bien siempre se que decir,
Misterioso, posteo mis mensajes cifrados,
En tu propia frente, arriba de tu nariz,
Y tus ojos susurran, y no los ven...
A este misterio encarcelado,
Restale la sarta de frases ceratiescas
Y siempre podras ver
Que tan lejos siempre intento llegar...
Y otra vez vuelvo a mi lugar,
A intentar seguir esto de jugar,
Y de cada tanto, siempre, callar...
+ mAro +
"Y no lo comprendo..."
No hay comentarios.:
Publicar un comentario